Los ideales se destruyen.

Ciertamente, aprendemos de las caídas. Aunque vivimos en la misma sociedad, también es cierto que realmente... No todos vivimos en el mismo mundo.

Mira a tu alrededor y te darás cuenta. Hay niñas que viven en burbujas, mientras otros flotamos en nubes negras. No quisieras tenernos cerca los días de lluvia.

La desgracia de la conciencia y la calma de la ignorancia, son en realidad... Dos mundos diferentes. Es como dibujar pupilas en unos ojos cerrados y lanzarlos al mundo. Zombies ciudadanos del mundo ideal, zombies que duermen tranquilos. No deberían.

Luego estamos nosotros, los execrados. Los que nunca dormimos de noche. Los que jugamos para sobrevivir.

Pero lo más importante, son ellos. Los que miran a través de la ventana y cuentan las historias de las cicatrices.

Capaz sea tu historia la próxima en quitarme el sueño... O viceversa.