Tener una ayuda que no esperabas.
Sonreir a escondidas.
Gracias por arriesgarte y hacerme llegar hasta aquí, hasta el comienzo.
Esa forma especial de cuidarme, los recuerdos que se aferran a la piel.
Los recuerdos con los que sobrevivo, con los que muero.
Gracias por hacerme sentir que puedo romper paradigmas y hacer desaparecer ese miedo a ser diferente.
Peleaste por mi y cambiaste mi vida, gracias.
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2 comentarios:
Ay es demasiado lindo esto, Nats, sabes que amo como escribes.
Y te amo a ti <3
Conmovido, Natasha. Muy conmovido: escribes con fuerza y puntería. Ibsen
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